Elecciones presidenciales en Honduras: un ejemplo de civismo por parte del pueblo hondureño
Via RELIAL Hugo Maul, director del área económica de CIEN-Guatemala, miembro de RELIAL, participó como observador internacional en las elecciones presidenciales en Honduras celebradas el día 29 de noviembre de 2009. Hugo formó parte de la delegación de la Red Latinoamericana y del Caribe para la Democracia, organización que agrupa a más de 160 organizaciones e individuos comprometidos con la defensa de los principios de la democracia liberal. Esta delegación […] Leia mais
Publicado em 3 de dezembro de 2009 às, 09h58.
Última atualização em 24 de fevereiro de 2017 às, 12h39.
Via RELIAL
Hugo Maul, director del área económica de CIEN-Guatemala, miembro de RELIAL, participó como observador internacional en las elecciones presidenciales en Honduras celebradas el día 29 de noviembre de 2009. Hugo formó parte de la delegación de la Red Latinoamericana y del Caribe para la Democracia, organización que agrupa a más de 160 organizaciones e individuos comprometidos con la defensa de los principios de la democracia liberal. Esta delegación contó con la participación de 13 observadores de 11 nacionalidades distintas.
De acuerdo a lo que Hugo nos ha reportado, las elecciones hondureñas fueron un ejemplo de civismo por parte del pueblo hondureño. Con una participación pocas veces vista en el pasado reciente, el pueblo hondureño mostró, mediante su voto, un claro rechazo al afán expansionista de los países del grupo de la Alternativa Bolivariana para América Latina y el Caribe (ALBA), especialmente, contra la injerencia de Hugo Chávez en la región. La misión de observación en la que participo Maul se desplazó hacia el departamento de Olancho y hacia ciertas áreas periféricas de Tegucigalpa. Salvo incidentes menores, normales en todo proceso de este tipo, la elección se realizó en paz, libertad y armonía.
En ningún momento se vio a personal de las fuerzas de seguridad atemorizando y/o forzando a la gente para emitir el sufragio. El papel de las fuerzas armadas fue de un respeto irrestricto a las autoridades civiles y electorales. La transparencia con la que operaron las Mesas Electorales Receptoras fue excepcional, al punto que el conteo final de votos ocurrió bajo el escrutinio de los propios electores, quienes en muchos centros de votación, permanecieron dentro de los mismos vigilando el conteo final.
El pueblo hondureño ha dado un ejemplo al mundo en torno a la defensa de la democracia. No hay razón alguna para dudar de la legitimidad de estas elecciones, mucho menos para pretender robarle al pueblo hondureño el derecho a oponerse a regímenes autoritarios, sean del tipo que estos sean. Llámense como se llamen. Este ejemplo del pueblo hondureño debe servir de inspiración a los demás pueblos bajo regímenes autoritarios y despóticos y para aquellos que, teniendo aún un sistema relativamente libre, están bajo el acecho de Chávez y Castro.